El pasado viernes, en el Auditorio Miguel León Portilla, del Centro Cultural Bicentenario de Texcoco, se llevó a cabo el 1er. Foro para lograr reformar la Ley de Protección a Periodistas en el Estado de México.
Desde hace 30 años en el SNRP hemos luchado por el bienestar de los compañeros y compañeras, haciendo foros buscando que al periodista se le dé el lugar que merece ante la sociedad, y esas capacitaciones han servido para que muchos compañeros superen su nivel de vida; actualmente ya existe mayor capacidad y el empirismo ha ido desapareciendo, no obstante existen autoridades, sobre todo policíacas, que no respeten la labor de los reporteros y muchas autoridades de los municipios también, incluyendo a los presidentes municipales.
En la gubernatura no es la excepción y nuestros compañeros de medios pequeños están desapareciendo. Ahora mismo cuando un grupo de periodistas se adjudican el promover determinados foros, sin el apoyo del gobierno del estado empiezan las desventuras como narramos en nuestro comentario radial.
Sorpresivamente y a pesar de que el mismo día, la Gobernadora Delfina Gómez , canceló su presencia en el Foro, pues tuvo que acompañar a la Presidente de México, Claudia Sheinbaum, a la entrega de Tarjetas del Programa de Mejoramiento a la Vivienda, hubo buena asistencia de comunicadores, en su mayoría, representantes de medios locales, regionales, y estatales, que publican en portales por internet y Redes Sociales.
Todo apuntaba a que por fin los Reporteros del Valle de México, podrían tener un encuentro de ideas, de manera libre, consensuada y fructífera, que les permita lograr la tan anhelada Reforma Integral, hecha por y para Periodistas, sin embargo, todo empezó mal, desde la recepción oficialista, en la que arbitrariamente algunos editores se autonombraron coordinadores y organizadores del mal llamado grupo de los 100.
Y no es que esté mal que se procure una organización, pues finalmente la finalidad es la unidad del Gremio, lo que para algunos periodistas, no fue correcto, fueron las decisiones no consensaudas, la cuáles deben ser aceptadas por la mayoría.
La convocatoria y como se decidió el programa a seguir, no se respetó, pues las decisiones fueron tomadas por alguien, o algunos, desechando designaciones y ponencias, sin mayor explicación, simplemente así lo decidieron los llamados coordinadores.
La gota que derramó el vaso, fue la decisión de dar la palabra a representantes del gobierno, quienes si bien ofrecieron el espacio del Centro Cultural, para el desarrollo del Foro, no debian ser más que invitados, no oradores, pues finalmente, lo único que escuchamos fueron retóricas de discursos, de los cuales estamos hartos y en nada aportaron, si no por lo contrario, nos confirman que no hay una real intensión de respeto a los periodistas, quienes debieron ser considerados y escuchados.
Esto obligó a que en un intermedio, un pequeño grupo de Reporteros, decidiera tomar la tribuna y externar su inconformidad, ante el manejo oficialista del evento, ante la negativa de permitirles ser escuchados, sólo por no haber registrado su ponencia ó simplemente se les ignoró.
Para colmo, a medio desarrollo del Foro, una supuesta alerta, que en un principio nadie sabía la razón del porque se activó, provocó el desalojo del recinto por varios minutos y no fue si no hasta que a insistencia de algunos reporteros, se supo que al parecer se activó una alerta de incendio, pues supuestamente alguien había encendido un cigarrillo en los sanitarios.